Durante la vida de nuestros perros, la mayoría se ve enfrentado a sufrir
problemas de rodilla, ya sean crónicos como una enfermedad degenerativa articular, o agudos
como un traumatismo.
Para el ojo no experto de los propietarios de mascotas, las cojeras de rodilla suelen ser difíciles
de identificar, ya que éstas pueden ser muy leves, e incluso presentar un patrón intermitente, no
perdiéndo la movilidad de la extremidad por completo.
Es muy común escuchar a las familias comentar que se demoraron mucho en consultar debido a que en
ocasiones “despertaba cojo”, pero al pasar del día “se le quitaba solo” e incluso corría.
Por lo mismo es importante estar atentos y conocer la marcha o caminar de nuestra mascota, ya que
esto nos ayudará identificar problemas e instaurar un tratamiento en forma oportuna para evitar que
la lesión siga progresando.
En la experiencia del Dr. Reyes, dentro de los problemas más comunes en las rodillas de nuestros
perros se encuentra la ruptura de ligamento cruzado anterior y la luxación de rotula.
Ambas lesiones pueden presentarse en todo tipo de perros y a cualquier edad. Esto se debe a que la
articulación de la rodilla de los perros es bastante inestable y depende bastante de la musculatura,
peso y edad.
En este sentido, un perro más joven no tendrá bien consolidados sus ligamentos, ni tampoco tendrá
suficiente musculatura, por lo que ambos factores favorecerán que sufra una lesión.
No es que exista una predisposición, pero si representan más riesgo de sufrir este tipo de lesiones.
El motivo radica en que si a los dos factores mencionados anteriormente le agregamos que el bulldog
es un perro pesado, esta probabilidad será aun más clara, especialmente en cuanto a ligamento
cruzado.
Este ligamento no es de una gran longitud ni elasticidad, por lo que cualquier carga muy fuerte
sobre la rodilla hará que se corte con facilidad, por ejemplo, al saltar desde o hacia un sillón o
una cama.
Respecto de la luxación de rotula, aquí sí tienen una cierta predispoción, ya que en muchos casos
las articulaciones de la rodilla del bulldog no tienen un buen alineamiento y esto predispone a que
la rotula de pueda luxar.
Los síntomas son variables dependiendo de cada perro, sin embargo, dentro de los más generales se encuentran:
En el caso de los bulldogs los síntomas son muy importantes, ya que esta raza presenta una alta
tolerancia al dolor, por lo que podemos ver perros con corte de ligamento cruzado que corren y
saltan, no obstante se levantan todos los días cojeando bastante y luego disminuye en el transcurso
del día.
Que el perro sea capáz de correr y saltar no implica que la lesión no exista, por el contrario, ese
exceso de movimiento podría producir mayores daños a posterior.
En este sentido se hace indispensable que al presentar una cojera con estas características sea un
médico especialista quién lo vea, ya que éste podrá reconocer signos clásicos de la lesión, los
cuales podrían pasar desapercibidos para un médico general.
Este punto es muy importante, ya que el tratamiento general para un cojera es entregar algunos anti
inflamatorios y esperar que ésta pase, sin embargo, un especialista detectará otros síntomas que
pudiesen hacerlo sospechar de una lesión mayor, lo que permitirá determinar la realización de
exámenes específicos que posibiliten confirmar o descartar la lesión antes de que ésta se agrave.
La rotula pertenece a un grupo de huesos llamados sesamoideos. Estos huesos suelen ser pequeños, redondeados y están cubiertos por tendones.
Dentro de sus funciones se encuentra el disminuir el roce en la articulación y guiar que la rodilla pueda realizar un movimiento correcto. La principal función de la rótula es aumentar el trabajo del músculo llamado cuádriceps, permitiendo que se transmita la fuerza que este músculo genera cuando se contrae.
Si la rotula constantemente se está luxando, todas las tareas antes mencionadas no podrán ser efectuadas
de manera correcta, lo que lleva a una cojera. Además la luxación hace que constantemente este tejido
cartilaginoso se esté dañando, provocando la perdida de éste, con la posibilidad de generar una
enfermedad degenerativa articular en la zona, como artrosis por ejemplo.
Dentro de las causas comunes por las cuales se produce una luxación de la rótula se encuentra el mal
alineamiento de la pierna, esto provoca deformaciones durante el desarrollo y hacen que la rótula salga
de su lugar. Este mal alineamiento puede ser originado por varias causas:
En ambos casos, el paciente presenta molestias en la articulación, crepitaciones y aumento del dolor en
la zona de la rodilla. Esto repercute en su vida ya que baja su actividad física, evita escaleras, le
cuesta incorporarse luego de estar sentado o acostado.
El tratamiento depende del grado de luxación y van desde fisioterapia hasta tratamiento quirúrgico en el
cual hay variadas técnicas para corregir el problema.
El ligamento cruzado anterior se encuentra en la mitad de la rodilla, entre los meniscos.
Dentro de sus principales funciones se encuentran:
En general el paciente comienza con una cojera aguda, no apoya o carga suavemente los cojinetes sobre el suelo. En el caso del bulldog es distinto: cojea levemente e incluso podría correr. Sin embargo en casi todos los casos, al momento de cortarse el ligamento, el perro suele soltar un grito de dolor.
Luego de esto pasa por etapas en las cuales puede apoyar la pata y dar unos pasos, sin embargo luego la encoje. En bulldogs, esto puede ser permanente, puede caminar bastante sin cojear salvo aquellos momentos en que se pone de pie.
Es una cojera bastante intermitente y responde bastante bien a desinflamatorios y analgésicos, lo cual puede ser perjudicial ya que este tratamiento permitirá que el perro genere carga en la rodilla que no tiene un mecanismo para mantenerse estable. Es por este motivo que es tan relevante consultar especialistas cuando se observa una cojera, porque tratar el dolor, en perros con alta resistencia, y mucho peso como es el caso del bulldog, puede causar daños tremendos en un perro con una lesión.
En efecto, existen factores predisponentes como el sobrepeso, problemas endocrinos, tipo de actividad o deporte que realice el perro, por ejemplo subir y bajar mucho escaleras, subidas o bajadas muy bruscas de alturas someten a un estrés por sobre lo tolerable para el ligamento.
Si tomamos un bulldog, lo hacemos subirse y bajarse de la cama o del sillón, y consideramos que: es una raza que debido a inescrupulosos que cruzan perros con problemas congénitos de luxación de patelar, tiene como consecuencia un gran porcentaje de perros con predisposición genética a ello; que además se le suma su gran peso, falta de músculo por juventud y su gran tolerancia al dolor; tenemos todos los requisitos necesarios para un corte de ligamento cruzado, problema que le ocurre a un porcentaje súmamente alto en la raza, especialmente en perros jóvenes.
Dentro de las formas de diagnóstico se encuentra la prueba de cajón, la cual consiste en sedar levemente al paciente y desencajar la tibia del fémur. Si se logra dicho movimiento es indicativo de que hay una ruptura del ligamento.
Otra alternativa es la ecografía la cual nos aporta bastante información ya que nos puede ayudar a ver además en qué condiciones se encuentran el resto de los ligamentos que componen la articulación. Sin embargo, debiese confirmarse con la prueba de cajón.
Además de estas técnicas esta la Resonancia Magnética para ver con imágenes toda la estructura de la rodilla, sin embargo el alto valor de este exámen lo hace menos probable de realizarse.
En caso de ser positivo el corte de ligamento a cualquiera de
estas
pruebas, la resolución es quirúrgica.
Dentro de las cirugías existen variadas posibilidades: técnicas extracapsulares,
técnicas dinámicas. Es
el especialista quien decidirá cuál será la mejor alternativa para cada
paciente.
Posterior a la cirugía, la fisioterapia es esencial para la pronta recuperación del
perro y varía en
función del animal y del tratamiento quirúrgico que se realizó.
Es importantísimo que la fisioterapia sea realizada por especialistas para escoger
las mejores técnicas
de recuperación y así lograr un post operatorio rápido y sin dolor.
El corazón está recubierto de una capa protectora llamada pericardio. Esta capa lo protege, lo recubre y lubrica para que se contraiga correctamente y así evitar que el músculo cardiaco se dañe. Entre el pericardio y el corazón hay un mínimo espacio y que contiene una mínima cantidad de líquido para lubricar el corazón.
Con algunas patologías patológicas, se acumula líquido entre el pericardio y el corazón. Esto se
conoce como derrame pericárdico, el cual puede llegar a comprimir las cámaras del corazón, lo
que se conoce como taponamiento cardiaco.
Cuando ocurre esto aparecen síntomas muy inespecíficos que pueden ir desde la fatiga a el
desmallo, pero además podemos ver falta de apetito, pulso débil, mucosas pálidas y a al
auscultar el corazón hay ausencia de sonidos cardiacos. Si no se trata el taponamiento cardíaco
en forma rápida se podría provocar shock y la muerte. Por este motivo es una urgencia que hay
que tratarla en forma inmediata.
Las causas pueden ser variadas, como neoplásicas, infecciones o de causa desconocida.
El manejo de urgencia consiste en drenar este líquido puncionando entre el pericardio y el
corazón.
En caso de que el derrame vuelva a aparecer en forma rápida el tratamiento es quirúrgico en la
cual se extrae una porción de pericardio, esto se conoce como Percardioectomia.
Cualquiera de estas
situaciones puede terminar con tu mascota en el veterinario.
Las fracturas en perros
gatos duelen mucho y pueden llegar a paralizar al animal. La recuperación definitiva puede tardar
bastante tiempo y, en algunos casos, es posible
que el paciente tenga que pasar por cirugía .
Pero con unos buenos cuidados, lo normal es que tu
amigo de cuatro patas pueda volver a correr y a jugar como si nada le hubiese sucedido.
Si tu perro se ha hecho daño en una pata, tienes que tener especial cuidado
si presenta una fractura abierta. Y es que, cuando la fractura es abierta, no solo se desplaza el
hueso, si no que además, este queda expuesto al exterior.
Por ello, tendrás que seguir las instrucciones de tu veterinario en lo que respecta a las curas y
cuidados tras el accidente para prevenir cualquier infección. También debes saber que, en los casos
de fracturas abiertas en perros, la curación es más larga y suele requerir de tratamiento
quirúrgico.
Si tu perro se ha hecho daño en una pata, tienes que tener especial cuidado si presenta una
fractura
abierta.
Por supuesto, lo que debes hacer si tu perro se ha hecho daño en una pata, es acudir al veterinario.
Si detecta una fractura, la radiografía es la mejor manera de determinar el alcance de la
lesión.
Para inmovilizarla, el veterinario usará un vendaje o una tablilla y, en caso de que lo considere
necesario, es posible que programe una cirugía. Por tu parte, no sufras al ver a tu perro vendado:
se acostumbrará muy deprisa y no le causará incomodidad.
Si tu perro se ha hecho daño en una pata y ha sufrido una fractura, su movilidad quedará,
obviamente, reducida. Para desplazar al veterinario, te recomendamos ponerlo en alguna superficie
que pueda hacer la función de camilla.
En resumen, si tu perro presenta una lesión en una pata y temes que pueda sufrir una fractura, debes
acudir al veterinario lo antes posible. Así podrá ver el alcance de la lesión y tratarlo como es
debido para que pronto vuelva a correr y saltar.
1. Narina no operada 2. Narina post resección
El síndrome braquiocefálico afecta a razas braquiocefálicas de perros como Bulldog Inglés, Bulldog Francés, Boxer, Boston Terrier, Pug, Pekines entre otros y gatos como los persa. La conformación anatómica en los cráneos de estos animales produce desórdenes en la nasofaringe. Los cuatro mayores componentes del síndrome son:
Los síntomas se deben a la obstrucción de las vías aéreas superiores producto del estrechamiento en las narinas, la prolongación del paladar blando y la eversión de los sáculos laríngeos.
Dentro de los signos clínicos más evidentes encontramos:
Todos estos signos se acentúan con el ejercicio, la excitación o altas temperaturas. La cirugía de las narinas y del paladar blando es la terapia de elección. En Hospital Veterinario Oriente contamos con las herramientas diagnósticas y quirúrgicas para la resolución de estas patologías.
Se produce una fractura de mandíbula cuando el hueso se quiebra. Es posible que el hueso de la mandíbula tarde semanas o incluso meses en curarse.
Las fracturas de mandíbula y maxilofaciales en los gatos y perros, frecuentemente tienen un origen traumático, y son producidas tras las caídas de alturas, atropellos y/o golpes recibidos.
Radiografías es el método mas utilizado.
Usualmente son de resolución quirúrgica por lo cual en
Hospital Veterinario Oriente contamos con todos los implantes de última
tecnología y altos estándares para realizar cirugía mandibular y
maxilofacial.
Dr. Felipe Reyes Riveros
Médico Veterinario Cirujano
Traumatología y Ortopedia Hospital Veterinario Oriente
Cuando hablamos de hernias discales nos referimos a patologías que afectan a los discos intervertebrales de la columna, que causan una compresión en la médula espinal. Las hernias de disco toracolumbares constituyen una patología frecuente en los perros.
En algunas ocasiones se pueden seguir tratamientos conservadores con medicamentos, pero una vez establecido el diagnóstico con las técnicas disponibles (Idealmente Resonancia Magnética), el tratamiento debe ser quirúrgico mediante descompresión.
SINTOMAS:
En Hospital Veterinario Oriente contamos con las herramientas para el tratamiento quirúrgico correcto de este tipo de patologías y de esta forma tratarlas y llevar un completo seguimiento de nuestros pacientes.